martes, marzo 22, 2005

-.Intentaré escribirte.-


Hoy intentaré escribirte nuevamente, últimamente tal vez he dejado de hacerlo, la verdad, porque me aterra lo fácil que me resulta abofetear tu ausencia con letras dibujadas a pincelazos en la oscuridad, porque me inquieta lo placentero que me resulta que flotes en mi, lo excitante que es envolverme en soplos de inspiración provocada por el recuerdo de tus labios.

Intentaré hacerlo nuevamente, no porque lo necesite, sino porque tal vez, me agrade pensar no en voz alta sino en tinta y papel. Probaré cantarte con palabras simples en párrafos cortos más no insipientes, con acentos que detesto no conocer, con pedacitos de verdades enrollados en delgadas tiras de sublime fantasía.

Intentaré escribirte sin pensar en ojos clandestinos que juegan a la indiferencia, lo haré, solamente por placer. Lo haré porque hace un momento vi la luna y me contó que dormías, lo haré, por los viejos tiempos, aquellos de despedidas felices y suspiros llenos de rubores sutiles.

Lo haré pensando en que otra forma se puede escribir tu nombre si no es con dibujos del humo de mi cigarro y labios clausurados por nostalgias deliciosas, lo haré pensando un beso después de las comas y elevándolo hasta la luna mientras le pido que lo deposite bajo tus pestañas, que lo esconda en tus sueños, que lo disfrace de caramelo, mariposa, ilusión, o cualquier otra cosa que persigas mientras duermes.

Lo haré feliz, no resignado, sino conforme y hasta tal vez agradecido de que hayas dejado a mi resguardo estas ganas de adorarte aun sabiendo que no se las entregaré a nadie jamás mientras haya cielo, luna y gotas de tiempo que caigan sobre mi espalda.

Hoy intentaré escribirte nuevamente, aunque tal vez, no sepa a ciencia cierta que decirte.

Luis Gonzalo Hernandez Zamora