viernes, febrero 04, 2005

-.Lecciones olvidadas.-

Heme aquí otra vez, jugando con consonantes, desafiando al olvido con viejas tácticas de tinta, tal vez…tratando de ignorar tus desdenes con pasos retorcidos.

Aprendí, tal vez sin desearlo, a difuminar ideas con los dedos de mi mano izquierda, aprendí también, a dibujar canciones en lienzos de humo, a mostrar sin pretextos mis sentimientos, a saborear sin remordimientos cada vez que se ocultaba el sol.

Aprendí que a cada paso que daba las líneas de mis manos siempre tomaban un rumbo diferente, que cada vez que respiraba me hacia mas bien a mí que a ti, que sin saber de reglas ortográficas bien podía cantarte dulcemente al oído.

Aprendí que no es suficiente saber leer, que a algunas personas les hace más falta saber sentir. Que no hace falta saber hablar sino aprender a escuchar.

Aprendí, a no dejarme seducir por la muerte, a caminar a su lado sin tomarla de la mano, a mirarla a los ojos sin estremecerme nunca más, a dejarle fumar de mis cigarros.

Aprendí también, que puedo ser tan bueno como el mejor, que el embrujo de una sonrisa, solo se cura con otra más grande y más sincera, aprendí que entre lágrimas, por muy gruesas que estas sean, siempre hay lugar para construir una nueva ilusión.

Aprendí que no necesito conquistar el universo, porque ya me pertenece, que nunca esta de más regresar de vez en cuando a recoger viejos pasos marcados por los caminos andados.

Aprendí que muchas cosas ya las sabía, solo necesitaba….recordar.

A pesar de todo, lo que no he querido aprender, es a no confiar tanto en las personas.

Luis Gonzalo Hernandez Zamora